viernes, 21 de febrero de 2014

“Siempre con el nombre de Dios en la boca y luego son los peores…” - dice mucha gente refiriéndose a los que se dicen “cristianos”.

¿Cuánto hay de verdad en esto? Yo diría que mucho. Yo soy cristiano pero creo que, honestamente, debo darte la razón.

También debo aclarar una cosa: No todos los que se dicen cristianos lo son de verdad. El verdadero cristiano debe imitar a Cristo. Y no puedes negarme que Cristo sí que fue un ejemplo de conducta y amor hacia los demás. Es a Él a quien se debe mirar. Jesús dijo: "En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuvieseis amor los unos por los otros”. (San Juan 13:35)

Si conoces gente que se dice cristiana y no ama al prójimo, tienes derecho a dudar. Pero no dudes de Cristo. Duda que esa gente sea cristiana.

En mi corta vida he aprendido que puedo dudar de muchas cosas y de mucha gente, pero jamás debo dudar del amor de Dios.

Un consejo: Si quieres saber más del cristianismo, lee la Biblia y mira a Cristo



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